EL ROMÁNICO Y LA GASTRONOMÍA EN GALICIA:
-I- de -II-
Galicia es una región en la que el románico se manifiesta de una manera especial, sobre todo por su abundancia en monumentos de este tipo por casi todas las esquinas, coloquialmente hablando.
Si uno se pone a caminar por estas tierras, al doblar cualquier recodo, nos podemos encontrar con cosas sorprendentes, inesperadas y que fácilmente nos llamarán la atención.
ENTRADA AL MONASTERIO DE SANTA MARÍA DE OSEIRA (CEA-ORENSE) |
Estos paseos o andares, los podemos compatibilizar con la gastronomía, encontrando lugares sencillos pero con una cocina maravillosa.
Muchos de estos lugares se encuentran en lugares perdidos, recónditos, llenos de belleza y encanto.
A lo largo de los ríos Miño y Sil, jalonados de espectaculares embalses y cañones, se encuentra un tesoro artístico que merece la pena conocer.
A ambos lados de los citados ríos, fueron surgiendo en el transcurso del tiempo, a lo largo de la ruta jacobea, unos monasterios que daban atención y cobijo nocturno a los peregrinos que se dirigían a Santiago de Compostela.
En los alrededores de estos enclaves, existen casas rurales y restaurantes donde se puede compaginar el arte y la gastronomía.
En el interior de la región, con fáciles accesos, se encuentran una serie de pequeños y coquetos monasterios, que os invito a recorrer con tranquilidad y mimo.
En estos parajes, entre bosques, cañones (como los del río Sil), ríos y una vegetación variada no queda tiempo para aburrirse.
El primero, Santa María de Mezonzo, en al ayuntamiento de Vilasantar (La Coruña), cerca del pueblo de Arzúa, famoso por sus quesos, encontramos este primer ejemplo (foto superior), cuyos orígenes se remontan a época anterior al año 870 y por lo tanto se enclava en el prerrománico.
En estos parajes, entre bosques, cañones (como los del río Sil), ríos y una vegetación variada no queda tiempo para aburrirse.
ÁBSIDE DE SANTA MARÍA DE MEZONZO |
El primero, Santa María de Mezonzo, en al ayuntamiento de Vilasantar (La Coruña), cerca del pueblo de Arzúa, famoso por sus quesos, encontramos este primer ejemplo (foto superior), cuyos orígenes se remontan a época anterior al año 870 y por lo tanto se enclava en el prerrománico.
El segundo ejemplo lo encontramos en San Pedro de Vilanova de Dozón (ayuntamiento de Dozón-Pontevedra), entre las poblaciones de Lalín, famosa por su cocido, y Chantada,
capital del "riveiro".
Sus orígenes datan del año 1.124 y se encuentra enclavado en un pequeño valle en las proximidades del pueblo de Dozón.
Su iglesia románica es lo único que se conserva actualmente del antiguo monasterio y constituye un ejemplo excepcional entre las construcciones de esta clase.
Sus orígenes datan del año 1.124 y se encuentra enclavado en un pequeño valle en las proximidades del pueblo de Dozón.
ÁBSIDE Y FACHADA DE SAN PEDRO DE VILANOVA DE DOZÓN |
Muy cerca de estos dos enclaves, nos encontramos con el de San Esteban de Rivas de Miño, que adquiere una notable importancia por el gran desarrollo de estas instituciones en Galicia.
Se piensa que su construcción se inició en el siglo XII o principios del XIII y su actual iglesia constituye una de las mejores muestras del románico en Galicia.
VISTA GENERAL DEL MONASTERIO DE SAN ESTEBAN DE RIVAS DE MIÑO |
Se encuentra situado en plena "Rivera Sacra", rodeado de bosques, sobre una ladera excavada a orillas del río Miño, desde donde se divisa una espectacular panorámica.
En el tipo de construcción presenta similitudes que posiblemente tengan que ver con la cercanía de los monasterios de San Pelayo de Diomondi y Santa María de Pesqueiras.
Muy cerca del primero de estos monasterios y enfrente, al otro lado del río, del monasterior de San Esteban de Rivas de Miño, en la carretera vieja de Chantada a Monforte de Lemos, pegado a los embalses de Belesar y Los Peares, se encuentra una antigua casa, típica gallega, restaurada y habilitada para establecerse allí un magnifico restaurante llamado "Casa da Veiga" (teléfono 982-453-079), donde podemos degustar unas estupendas cigalas o cualquier otro producto de la tierra, en unas estupendas instalaciones y regado por un buen vino tinto casero de "Rivera Sacra", denominación de origen de productos "Galicia Calidade".
A muy pocos kilómetros, en la misma carretera, dirección a Monforte de Lemos, tomando una pequeña desviación señalizada, a la izquierda, entramos en un frondoso y maravilloso valle, regado por el arroyo "O Sabiñao" y en este enclave está ubicada una casa rural llamada "Casa Vilamor", en el lugar llamado Piñeiro (San Saturnino) en el municipio de O Saviñao (teléfonos 982-452-384 y 982-191-942).
RESTAURANTE "CASA DA VEIGA" |
CASA RURAL "CASA VILAMOR" |
En este paraje podemos disfrutar de una agradable y tranquila comida a base de productos de la tierra como jamón, chorizo, cordero, carne asada, etc., todo ello casero y preparado de forma tradicional, en cocina de leña y regado por un un vino tinto casero de la tierra y al mismo tiempo disfrutar de diversas actividades e incluso pernoctar.
En toda esta zona, en los triángulos formados por los pueblos de Chantada, Lalín y Guntín por un lado y, Mellid, Arzúa y Vilasantar por otro, existen variedad de casas rurales de las que podremos disfrutar de gran variedad de actividades en las que entretenernos, como paisajistas, náticas, gastronómicas, deportivas, agropecuarias, etc.
En el siguiente capítulo, ya que no me gusta alargarme mucho en cada uno, veremos algunos otros ejemplos de estos lugares.
Os animo a que, si tenéis tiempo y todo lo demás que hace falta para pasar unos días de turismo, no dejéis de visitar estos lugares.
MAGNIFICA PORTADA DE SAN ESTEBAN DE RIVAS DE MIÑO |
En toda esta zona, en los triángulos formados por los pueblos de Chantada, Lalín y Guntín por un lado y, Mellid, Arzúa y Vilasantar por otro, existen variedad de casas rurales de las que podremos disfrutar de gran variedad de actividades en las que entretenernos, como paisajistas, náticas, gastronómicas, deportivas, agropecuarias, etc.
En el siguiente capítulo, ya que no me gusta alargarme mucho en cada uno, veremos algunos otros ejemplos de estos lugares.
Os animo a que, si tenéis tiempo y todo lo demás que hace falta para pasar unos días de turismo, no dejéis de visitar estos lugares.
¡Merece la pena y estoy seguro que no os arrepentiréis!
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